Chef Rodrigo Castilla - Un joven emprendedor
¿Qué estamos haciendo los seres humanos en esta aparente eterna cuarentena?
¿Hacia dónde vamos?
¿De verdad se puede salir adelante en estos tiempos?
Estas 3 preguntas pueden ser respondidas por algunos jóvenes que aprovechan su tiempo y creatividad al máximo. Estos artistas usan su talento y pasión por sus trabajos y nos demuestran que nada los puede frenar en sus proyectos; y así es como crean un mundo mejor.
En esta ocasión el chef Rodrigo Castilla nos cuenta su historia y cómo él vio una oportunidad y creó un nuevo negocio.
Por el chef Rodrigo Castilla
Los chefs somos los únicos artistas a los que nos da placer ver a nuestra obra de arte ser destruida.
“Mi nombre es Rodrigo Castilla, tengo 25 años y soy egresado de la Universidad de las Artes en Florencia y Apicius International School of Hospitality en la carrera de Artes Culinarias. Estudié la carrera de Administración de Negocios de Alimentos y Bebidas. Mi especialidad es la cocina italiana y mediterránea; específicamente de las regiones de Toscana y de Emilia Romagna.
Mi sueño es abrir un restaurante de alta cocina para pocos comensales en lugares privados. Quiero crear experiencias personales y directas con los chefs, para que así la gente también sepa lo que está comiendo y se lo explique quien lo está cocinando; a esta experiencia se le llama Omakase en Japón. Normalmente, cuando uno va a un restaurante, pocas veces se conoce al chef; las personas solamente piden su orden leyendo el menú.
Desde hace 2 años vivo en Cancún. Justo empezando la pandemia, creé una marca de salsas de chiles artesanales y el servicio de catering privado de alto nivel. Ya había trabajado 4 años en Italia en restaurantes de alta cocina.
La idea de las salsas la empecé porque estaba trabajando de vendedor en un hotel y no me sentía satisfecho con dedicar mi vida fuera de la cocina; entonces decidí emprender un pequeño negocio de comida y mostrar mi sazón al mundo de alguna forma.
Cuando cierran los hoteles me quedo sin trabajo, y me dedico a posicionar la marca en esos meses en Cancún y a proponerme convertirlas en las mejores salsas artesanales de la península de Yucatán; lo cual al día de hoy, ya lo logramos.
Durante esos meses, los restaurantes también estaban cerrados y la comida en casa era algo casi obligatorio. Por ahí de junio de 2020, las fronteras comenzaron a abrirse y el turismo norteamericano y mexicano regresó a nuestras playas; pero los restaurantes seguían cerrados.
Mi suegra se dedica a los bienes raíces y renta varias casas frente al mar para huéspedes de diferentes nacionalidades. Todo seguía cerrado y ella me comentó que sería buena idea que yo ofreciera mis servicios de prepararles sus comidas o cenas en sus casas; ya que ellos no querían o no podían salir a comer a restaurantes.
Esto les pareció muy buena idea y me empezaron a contratar; y así fue como inició mi negocio de catering privado. Al correr la voz me comenzaron a llamar cada vez más, ya que salía menos costoso y con un servicio personalizado. Ahora tengo un esquema de trabajo con menús fijos lo cual ha sido muy atractivo.
Al día de hoy he organizado más de 20 cenas privadas con hasta 15 comensales al mismo tiempo. Hemos preparado cenas italianas, griegas, españolas y árabes, entre otras. Siempre usamos ingredientes frescos, como pescados, langostas y vegetales orgánicos. También preparamos nuestras propias pastas y hacemos noches especiales de falafel.
Esto lo hacemos mi novia y yo, quien actualmente es mi Sous Chef.
Mi objetivo es ampliar el negocio, llegar a tener un local fijo o una casa rentada para ofrecer cenas de lujo frente al mar y eventos privados para comensales que buscan calidad y privacidad en la bella ciudad de Cancún. Hasta el día de hoy estoy muy feliz ya que estoy compartiendo mi conocimiento y mi sazón con gente de todo el mundo y ayudando a crear noches inolvidables”.
Para las salsas los puedes encontrar en IG @mamaninamx
Y a Rodrigo en su IG @rodrigocastilla y FB @rcastillah
